top of page
Alberto Correa

Por que SÍ invertir en la bolsa - parte 2

Después de dar una pequeña introducción sobre las barreras de entrada al mercado bursátil; así como mencionar la facilidad con la que se puede tener acceso al conocimiento financiero en la actualidad. Ahora toca hablar de las dos siguientes barreras. De las cuales, la primera tiene un peso muy importante en la toma de decisiones, ya que es referente a la seguridad de nuestro dinero e identificar cómo podemos confiar en las instituciones que lo manejan. Y posteriormente, comentaré sobre el capital que se requiere para iniciar esta nueva aventura.


Empecemos entonces.


Desconfianza en las empresas que forman parte del sector.


Como mencioné anteriormente, creo que es la barrera de mayor peso para tomar una decisión e incursionar en la bolsa. Y es que en la actualidad se ha incrementado el número de instituciones que ofrecen servicios financieros, y muchas de estas operando solamente en línea. Algo diferente a lo que estábamos acostumbrados a ver, ya que por años, la banca tradicional ha estado conformada por sucursales físicas, siendo también prácticamente siempre los mismos participantes. Es por lo tanto entendible, que estos cambios generen incertidumbre.


Por lo que para estar más tranquilos al momento de escoger la institución financiera de nuestro agrado, lo más importante es verificar que sean entidades reguladas por las autoridades de cada uno de nuestros países (al pie de página integro algunas de las entidades regulatorias en Latinoamérica que podemos consultar, para saber si las instituciones que hay en el mercado, están debidamente establecidas). Con esto evitamos abrir cuentas que posteriormente resulten ser fraudulentas, ya que nos aseguramos que se ajustan a la legislación correspondiente.


Y ¿Por qué a la regulación de cada uno de nuestros países? Bueno, hoy día operan muchas plataformas en internet, que si ciertamente no son fraudulentas, sus operaciones se encuentran en países como Belize, Chipre o Polonia (por ejemplo, eToro, XTB, Plus 500, entre otras). Por lo que de inicio, contamos con 2 desventajas. La primera es un tema fiscal, ya que en el caso de México, y muchos otros países, los bancos son los encargados de realizar la retención de impuestos, por lo que si optamos por este tipo de opción, la responsabilidad del cálculo y pago de impuestos recae en nosotros; además, que al no conocer las regulaciones de los países donde se encuentran establecidas dichas empresas, cabe la posibilidad de hacer un doble pago de impuestos, lo cual no sería nada agradable. Y el segundo punto, imaginemos que requerimos acudir a las oficinas de la compañía por alguna eventualidad (remota pero que no deberíamos descartar), tendríamos que hacer un viaje, no programado a dichos países, con el fin de resolver nuestro problema, tal vez como diría la abuela - salió más caro el caldo que las albóndigas.


Y ¿Qué hay de las plataformas que operan 100% en línea? Actualmente en varios países de Latinoamérica se encuentra en proceso de elaboración y/o aprobación la llamada ley Fintech, que permitirá que este tipo de empresas operen con mayor transparencia. En el caso de México, dicha ley opera desde 2018, y ha ayudado a que un mayor número de emprendedores creen sus aplicaciones; o bancos ya establecidos, generen las propias. Y este último punto es muy importante, tanto ha sido el éxito de las empresas Fintech, que la banca tradicional se ha sumado a desarrollar o comprar aplicaciones de servicios financieros; por lo que si aun se es un poco escéptico sobre las empresas a considerar, si decides acercarte a una plataforma que sea parte de una institución en la que tengas mayor confianza, adelante.


Y al igual, como sucedió hace más de 20 años con el comercio electrónico, es cuestión de tiempo y darles una oportunidad, esto llegó para quedarse y evolucionar.


Se requiere un gran capital para poder invertir.


Hace algunos años así es como funcionaban las casas de bolsa, se requerían de cifras de alrededor de los 5,000 USD (100,000 MXN) por lo menos, para abrir una cuenta; y dependiendo del instrumento que se escogía, era necesario integrar un capital mayor capital, a fin de alcanzar mayores rendimientos. Lo cual dejó este sector fuera del alcance de la mayoría de la población, e hizo que a través del tiempo se fuera estigmatizando.


Sin embargo, en los últimos años ha dado un giro afortunado, gracias a la creación y regulación de las empresas Fintech, las cuales han facilitado el acceso a la bolsa y otro tipo de servicios financieros, a la población en general. Ya que dependiendo la institución, se puede aperturar una cuenta desde 5 USD (100 MXN). Lo cual es genial, ya que no importa el monto que se maneje, tus rendimientos serían los mismos si inviertes 1,000 pesos, un millón o más.


Así que, por qué no darles una oportunidad, si aun se tiene un poco la desconfianza, importante poder ingresar un monto mínimo aceptable. Como se dice en finanzas, no poner todo los huevos en la misma canasta. Y al mismo tiempo, servirá de mucho para conocer las instituciones, el sector y la forma en que se debe operar, dándose la oportunidad de obtener buenos beneficios en el camino.


Es así que con esto cierro el post de la presente semana, invitándolos a probar una muestra del pastel, y con esto decidir si se aventuran por una rebanada o más.


Saludos.



Nota: Lo prometido es deuda, asi que les dejo un pequeño listado de las entidades regulatorias de nuestros países: La CNVB en México, CNV en Argentina, CMF en Chile, SF en Colombia, SB en Guatemala, SMV en Panamá, SSF en Uruguay, etc.. En el caso de México, la liga donde se puede validar a través del nombre comercial de las enmpresas, es: https://www.cnbv.gob.mx/Paginas/BusquedaEntidades.aspx.

14 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page